En general, los regalos se dan en el Año Nuevo Chino, bodas, nacimientos y, más recientemente, cumpleaños.

Es tradición llevar un regalo cuando te invitan a casa de alguien. Normalmente, las flores frescas o la fruta son la mejor opción (el número ocho se considera de buena suerte, así que ocho naranjas son una buena idea) o, por supuesto, cualquier cosa que tengas en casa. Cuanto más caro sea el regalo, más respetuoso, pero no te excedas o podrías incomodar a tus anfitriones, quienes podrían sentir la necesidad de arruinarse para corresponder a tu generosidad. No te sorprendas si, si tu regalo está envuelto, lo colocan en un lugar destacado toda la noche y no lo desenvuelven hasta después de que te vayas (tus anfitriones podrían parecer codiciosos e ingratos si abren la caja del regalo demasiado rápido y delante de ti). También es cortés traer algo de un viaje; un pequeño detalle está bien. Pero asegúrate de ser justo al dar regalos: no le des algo mejor a la secretaria de la oficina que al decano de la facultad, y no le des a un grupo de estudiantes que a otro; se darán cuenta. Apuesta por ello. A menudo, es mejor dar algo que se pueda compartir, como comida.