Aunque no parezcan una parte esencial de la construcción interna de edificios o de los sistemas de fontanería, las abrazaderas cumplen una función muy importante al sujetar las tuberías, suspenderlas o asegurar las instalaciones. Sin abrazaderas, la mayoría de las tuberías acabarían rompiéndose, lo que provocaría un fallo catastrófico y daños importantes en la zona afectada.

Las abrazaderas para tuberías, esenciales para fijar o estabilizar todo tipo de tuberías, han evolucionado a lo largo de los años, pasando de simples cuerdas o cadenas a piezas fabricadas que se adaptan a diversas situaciones y condiciones. Su función principal es mantener una tubería o un tramo de tubería en su lugar, ya sea fijo o suspendido en el aire.

En muchas ocasiones, las tuberías y los sistemas de fontanería relacionados tienen que pasar por cavidades.techoEn áreas como pasillos de sótanos y similares, para evitar que las tuberías estorben el paso de personas u objetos y, al mismo tiempo, permitir su instalación, deben elevarse por las paredes o suspenderse del techo.

Esto se logra con un conjunto de varillas fijadas al techo por un extremo y abrazaderas por el otro. De lo contrario, las tuberías se sujetan a las paredes con abrazaderas para mantenerlas en su posición en altura. Sin embargo, no cualquier abrazadera sirve. Algunas deben soportar temperaturas extremas. Cada abrazadera debe ser segura para evitar que la tubería se mueva. Además, deben ser capaces de compensar los cambios de dilatación del metal de la tubería, que pueden aumentar o disminuir su diámetro con el frío o el calor.

La simplicidad de la abrazadera oculta la importancia de su función. Al mantener la tubería en su lugar, este equipo ayuda a garantizar que los líquidos o gases que circulan en su interior permanezcan donde deben y lleguen a su destino. Si una tubería se soltara, los fluidos en su interior se derramarían inmediatamente en la zona o los gases contaminarían el aire de forma similar. En el caso de gases volátiles, incluso podría provocar incendios o explosiones. Por lo tanto, las abrazaderas cumplen una función vital, sin duda alguna.